Joaquim B. De Souza
El libro retrata el hábitat de los niños de antaño en el campo, conviviendo con animales y pájaros: la corruíra, el mirlo, el chupim, el anu de alas blancas, el anu de alas negras, el tiziu, las golondrinas, la paloma de alas blancas, la paloma de aire, la tórtola, el petardo, así como los sustos con monos y jaguares. En definitiva, el libro te hace pensar en las transformaciones, y en que es posible construir un mundo mejor sin destruir la naturaleza.EL NIÑO QUE CAZABA PÁJAROS es un libro que describe ambientes hostiles, apacibles y bucólicos que, si fuera necesario, el chico de campo iría más allá del horizonte, más allá de aquella colina o al otro lado del río. La narración trata también de la rígida educación de la época, una época en la que la obediencia a los padres era algo natural, espontáneo, porque sus padres eran sus proveedores. El libro gusta, instruye y entretiene.Por último, el libro explora el entorno rural de los niños de antaño, destacando su relación con la fauna local, desde pájaros hasta monos y jaguares. Al reflexionar sobre el cambio, el libro sugiere que es posible un futuro mejor sin sacrificar la naturaleza. «El niño que cazaba pájaros» presenta escenarios tanto desafiantes como pacíficos, además de abordar la disciplinada educación de la época, marcada por la obediencia natural de los niños. El libro es atractivo y educativo.Keywords: literatura infantil, misterio, aventuras, educación, ambientes hostiles, chico de campo, animales, pájaros, paisajes rurales.